lunes, 21 de marzo de 2016

LA SEMANA SANTA EN CUBA: DE LA PROHIBICIÓN A LA LIBERTAD OTRA VEZ


América Latina es una de las regiones del mundo donde mayor repercusión tiene la Semana Santa. Este es un hecho que a nadie puede extrañar si se tiene en cuenta que, según datos hechos públicos por el Vaticano, en 2010 Latinoamérica cobijaba a 483 millones de católicos, es decir: un 73 por ciento de la población profesaba la religión católica.





Más llamativo es el hecho de que en Cuba - isla caribeña que cuenta con más de seis millones de católicos- las celebraciones de Semana Santa, en contraste con el resto del continente, se pueden tildar de ‘discretas’.

De hecho, durante cuarenta años, los cubanos no conocieron las características procesiones de estas fechas, puesto que estaban prohibidas. El cambio en esta situación comenzó a producirse en la década de los noventa, cuando la Iglesia católica y el gobierno de Fidel Castro comenzaron un acercamiento que culminaría con la visita a la isla del Papa Juan Pablo II. Desde aquel momento –fue en 1998- mediarían varios años hasta que, en 2004, el catolicismo recibiera la ‘bendición’ oficial del régimen.

Este permiso se extenderia a la celebración del día de Navidad –único día de asueto de tradición católica que se celebra en la isla- y a las conmemoraciones públicas en las calles, como las procesiones de Semana Santa. Sin embargo, esta fecha, a diferencia de lo que ocurre en otros lugares, no es un período vacacional, por lo que la Iglesia ha tenido que adaptarse y celebrar las misas y los ritos en un horario compatible con las jornadas laborales.



A pesar de ser un país comunista, Cuba nunca llegó a prohibir taxativamente la religión católica, que es mayoritaria entre la población, junto a la yoruba –ritos africano-cubanos importados por los esclavos llegados de África hace siglos-, pero sí sus manifestaciones más públicas. En la actualidad, el régimen permite ya pertenecer al Partido Comunista y ser católico y emite en las radios locales mensajes religiosos durante la Semana Santa. Destaca entre estas concesiones, además, el hecho de que la televisión estatal haya empezado a retransmitir el Via Crucis que se celebra en el Vaticano.
FUENTE: lagaceta.es

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