Juan del Águila y Arellano nació en Ávila, en 1545, y murió 56 años después, en 1602, en La Coruña.
Soldado español, llegó a ser Maestre de Campo y combatió en todos los conflictos de la época en los que se vio envuelto su país y en todos aquellos acontecimientos famosos ocurridos en aquel entonces como: el sitio de Malta por los turcos, el saqueo y asedio de Amberes, el apoyo a los católicos franceses en las guerras de religión y en la expedición de apoyo a los católicos irlandeses.
Fuel cuarto hijo varón de Juan del Águila y Velasco y de Sancha de Arellano y, siguiendo las costumbres de su tiempo, al no ser primogénito, tuvo que buscar su fortuna en otros campos, y eligió, como hijosdalgo que era, el camino de las armas.
Con 18 años se alistó en la compañía de Gonzalo de Bracamonte que partía a incorporarse al Tercio de Sicilia donde serviría 24 años. Llegó a ser Maestre de Campo en dicho tercio.
Participó en la conquista del Peñón de Vélez de la Gomera y en el socorro de Malta asediada por los otomanos.
Participo en la marcha de los Tercios Viejos, a las órdenes del Duque de Alba, a Flandes en 1567.
Durante su estancia en Flandes, su capitán, Pedro Gutiérrez de Mendoza, lo ascendió a Alférez.
Estuvo en la victoria de Mook contra los rebeldes de Luis de Nasau, en el socorro al castillo de Gante, en el motín Alost y en el asalto y el saqueo de .Amberes. Precisamente él fue quien persuadió a los amotinados para ir en auxilio de Sancho Dávila que estaba asediado en el castillo de la ciudad de Amberes.
En 1577 es nombrado capitán.
Como consecuencias de los vaivenes de la política en Flandes, Juan del Águila y su Tercio recorrieron cuatro veces el muy famoso Camino Español en 6 años: de vuelta a Italia por la firma del Edicto Perpetuo en Mayo 1577; reclamados en Flandes por Alejandro Farnesio ese mismo año; devueltos a Italia en Febrero de 1580 y vuelta definitiva a Flandes nuevamente reclamados por Alejandro Farnesio en 1582. En éste último viaje emplearon cuarenta días.
El 16 de Agosto de 1583 murió el Maestre de Campo del tercio ante los muros de la ciudad de Dendermonde y Alejandro Farnesio nombro a Juan del Águila Maestre de Campo a la edad de 38 años.
Posteriormente, y formando porte del ejercito mandado por Ernesto de Mansfeld, acampó su Tercio junto al Tercio de Arias de Bobadilla, en la isla de Bommel. Isla formada por los ríos Mosa y Waal.
Los holandeses rompieron los diques y el agua subió de nivel y la isla quedó inundada.
Los españoles se protegieron en el dique de Empel, poco más que un camino vecinal elevado. Allí quedaron hacinados y expuestos a los elementos.
La flota holandesa penetro en las tierras anegadas con la intención de aniquilar a los tercios. Con la poca artillería que habían conseguido salvar, los hombres de Juan del Águila ocuparon una isleta y hostigaron a la flota rebelde impidiendo que se acercara.
La noche del 7 de Diciembre, los soldados que cavaban una trinchera para protegerse, encontraron enterrada una tabla con la imagen de la Inmaculada Concepción lo que fue considerado un buen presagio.
Esa misma noche, una fuerte helada hizo bajar la temperatura bruscamente y las aguas se helaron. La infantería española, andando sobre el hielo, asalto a los barcos holandeses.
Fue el Milagro de Empel y por este hecho la Inmaculada Concepción es la patrona de la Infantería Española.
Siguió peleando dos años más en Flandes donde fue herido de gravedad en Julio de 1587.
Antes de terminar de recuperarse fue llamado a Corte donde, en primavera de 1588, fue presentado al Rey Felipe II con las siguientes palabras: Señor, conozca V.M a un hombre sin miedo.
El Rey le asignó un Tercio de nueva creación que le esperaba en Santander. Este tercio formaba parte de la segunda oleada de desembarco en la campaña contra Inglaterra. Campaña que fue cancelada por el desastre de la Armada Invencible.
En Agosto de 1590 el Tercio pasó a Francia en apoyo de los católicos en la guerra de religión entre los católicos y el protestante Enrique III de Navarra (Enrique IV de Francia)
Desembarcó en Nantes y estableció su base de operaciones en el puerto de Blavet.
Combatió durante 8 años en la Bretaña francesa, dejando para la posteridad el magnífico Fuerte del Águila que todavía puede admirarse en Port-Louis (Bretaña), antiguo puerto de Blavet.
Desde éste puerto Juan dispuso que tres compañías de arcabuceros del Tercio, al mando de Carlos de Amézquita, realizaran la que posiblemente sea la primera incursión de tropas españolas en suelo inglés.
Zarparon en cuatro galeras que el 2 de Agosto de 1595. Desembarcaron en la Bahía de Mounts, junto al cabo Lizard, en la península de Cornualles, en el suroeste de Inglaterra.
En dos días saquearon e incendiaron varios pueblos, desmontaron la artillería de los fuertes ingleses y reembarcaron.
Un día después de zarpar, de vuelta de Belvet, se encontraron con una flota holandesa de 46 barcos de la que consiguieron escapar después de hundirles un par de naves. La operación se saldó con 20 bajas, todas ellas en la escaramuza con los holandeses.
Con la Paz de Vervins se devolvió a Francia la plaza de Blavet y el Tercio volvió a España.
Encarcelado en España, acusado de haberse aprovechado de la Hacienda del Rey, pudo demostrar su inocencia por lo que en desagravio se le asigno el mando de la expedición de apoyo a los irlandeses que se habían sublevado contra Inglaterra.
El 2 de septiembre de 1602 zarparon desde Lisboa 33 barcos con 4.432 hombres de los Tercios de Juan del Águila y de Francisco de Toledo con el objetivo de conquistar el puerto de Cook.
Juan del Águila era el mando supremo de la expedición como Maestre de Campo General.
La tempestad, que siempre se interponía entre los galeones hispanos y las costas inglesas, esta vez tampoco faltó a su cita y la flota se dispersó.
A pesar de ello, el Almirante Diego Brochero consiguió llegar a Kinsale el 1 de Octubre y desembarcar a unos 3.000 hombres pero sin provisiones. Los barcos que las llevaban tuvieron que regresar a Galicia.
Inmediatamente después del desembarco, la flota volvió a España a buscar refuerzos.
Juan del Águila quedó aislado con sus tropas en Kinsale, lejos de la ciudad, por lo que decidió esperar los refuerzos construyendo dos fuertes en la entrada de la bahía: Castle Park y Ringcurran.
Pronto apareció un ejército ingles con 10.000 infantes, 600 caballeros y numerosos cañones al mando de Charles Blount, al tiempo que una pequeña flota bloqueaba el puerto.
En Noviembre los ingleses atacaron y llagaron a tomar el fuerte Ringcurran, pero fueron rechazados.
El comandante inglés ofreció la rendición a Juan, la cual fue rechazada.
Los refuerzos, diez naves con 829 soldados al mando de Pedro de Zubiaur, desembarcaron en Castlehaven a unos 48 Km de Kinsale después de perder cuatro barcos por una nueva tempestad.
Avisado el mando ingles del nuevo desembarco español, envió una flota de 7 barcos al punto de desembarco. Después de cinco horas de combate, los ingleses solo consiguieron hundir un galeón español.
El puerto estaba defendido por una batería de 5 cañones por lo que no pudieron tomarlo y abandonaron el lugar.
Tras la victoria en Castlehaven, los nobles de la zona juraron fidelidad al Rey de España y aportaron 500 infantes y una compañía de caballería. Entregaron a los españoles los castillos cercanos.
Desde el norte de la isla baja en a poyo de los españoles un ejército de 5.500 soldados a las órdenes de Hugh O´Neil y Red O´Donnell. Establecieron contacto en Castlehaven con las tropas de Zubiaur quien la dio un apoyo de 200 infantes en su marcha hacia Kinsale.
El 3 de enero el ejército hispano-irlandés fue derrotado en la batalla de Kinsale debido a una mala coordinación entre ambos ejércitos (el de socorro y el sitiado) y a la superioridad de la caballería inglesa.
El 12 de enero, después de 104 días en tierra inglesa, Juan del Águila capituló.
Los términos de la rendición incluían la devolución de los castillos en poder de los españoles.
A cambio, los ingleses proporcionarían provisiones y transporte para regresar a España a los 1.800 soldados que quedaban en el ejército español así como a todos los irlandeses que lo desearan.
El ejército español conservaría su armamento, banderas y dineros.
Dos días después de la rendición, llegaba a Kinsale Martín de Vallecina con refuerzos, refuerzos que volvieron a España sin desembarcar. Un mes después el ejército llegó a La Coruña.
Juan sufrió arresto domiciliario y murió en la misma ciudad antes de que se celebrase el Consejo Supremo de Guerra contra él.
FUENTE. elcorreodepozuelo.com
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