viernes, 4 de marzo de 2016

DON FRANCISCO VERDUGO: HEROE DE FLANDES



Francisco Verdugo fue un militar español, Coronel de Infantería y Almirante de la Escuadra, en tierras de Flandes, con una destacada participación a las órdenes de los más famosos generales de la época: El Duque de Alba, D. Luis de Requesens, D. Juan de Austria y Alejandro Farnesio.

Nació en Talavera de la Reina en 1537 y murió en Luxemburgo a la edad de 58 años en 1595.

La familia de Verdugo era menestral por lo que no se correspondía con el prototipo de soldado español de entonces, es decir, no era hidalgo ni hijo de la pequeña nobleza empobrecida.

Con 19 años se enroló en la compañía que levantó Bernardino de Ayala en Talavera y participó en la famosa Batalla de San Quintín, cuya victoria dio origen al Monasterio del Escorial.

Más tarde entró al servicio del gobernador de Flandes Pedro Ernesto de Mansfeld, quedando vinculado a su casa desde entonces. Se casó con una hija natural del propio Mansfeld años después.

Con la rebelión de las Provincias Unidas de los Países Bajos contra la Gobernadora Margarita de Parma, se incorporó como capitán de una compañía de soldados valones dentro del Tercio del Maestre de Campo Cristóbal de Mondragón.

Siendo gobernador el Duque de Alba y durante el sitio de Haarlem, fue nombrado Sargento Mayor por Fadrique de Toledo, hijo del gran Duque, a propuesta de su Maestre de Campo.

Nombrado Coronel de un regimiento de infantería valona, Verdugo fue elegido, además, almirante de la Armada de Flandes, después de la derrota de la Armada española en la batalla naval de Zuiderzee.

En esta batalla, la armada española a las órdenes del Conde de Boussu, más potente y con mayor numero de navíos, fue derrotada por los mendigos del mar, corsarios holandeses rebeldes, y su almirante fue capturado.

Tras la muerte del Gobernador Luis de Requesens, la falta de autoridad real y el amotinamiento de las tropas por falta de pagas, dio lugar a una nueva revuelta popular muy virulenta contra las tropas y funcionarios españoles.

Verdugo fue apresado en Bruselas y retenido durante ocho días, consiguiendo escapar y refugiarse en Amberes. Mientras tanto, los Estados Generales rebeldes declararon fuera de la ley a todas las tropas españolas, autorizando a su asesinato sin previo aviso.

El 1º de septiembre de 1575 se produjo la quiebra de la Hacienda Real de Felipe II, lo cual impedía abonar las pagas que se debían a los soldados del ejército de Flandes que llevaban más de dos años y medio sin cobrar.

Por este motivo hubo motines entre las tropas. Un tercio amotinado ocupó la ciudad de Aalst para saquearla.

Las tropas rebeldes, aprovechando la situación, intentaron apoderarse del castillo de Amberes, donde estaba refugiado Verdugo.

El 3 de Octubre las tropas rebeldes formadas por más de 20.000 hombres entraron en la ciudad y tomaron posiciones para asaltar el castillo defendido por tropas españolas al mando de Sancho Dávila.

Los amotinados de Aalst eran unos 1.600 y no habían querido obedecer ninguna orden de sus mandos sin haber cobrado antes las deudas. Pero a tener noticias del ataque a Amberes por los holandeses, marcharon sin descanso hacia esa ciudad para ayudar a los sitiados.

Consiguieron llegar a Amberes en cuatro días sin las banderas del Rey para no profanarlas con su delito de rebelión. Al pedirle, el resto de las tropas de auxilio, que recuperasen fuerzas con algo de comida y descanso, replicaron que su propósito era “cenar en Amberes o comer en el Paraíso”.

Consiguieron entrar en el castillo y reunirse con otras unidades que acudían en socorro de Dávila. Una vez, reorganizados, atacaron desde el castillo por las calles de la ciudad, haciendo huir a los holandeses y saqueando la villa durante varios días. Verdugo participó en el saqueo.

Más tarde, D. Juan de Austria le encargó el mando de la fortaleza de Thoinville, con cinco compañías de infantería luxemburguesas. Y con ellas Combatió como Maestre de Campo general en la batalla de Gembloux, donde las tropas de caballería del ejército del Gobernador D. Juan de Austria, a las órdenes de Alejandro Farnesio, aniquilaron el ejército rebelde de los Estados Generales en hora y media de combate.

Después de la batalla, Verdugo fue nombrado gobernador de la plaza de Namur.

A la muerte prematura de D. Juan de Austria, el nuevo Gobernador General Alejandro Farnesio lo nombró gobernador de Frisia a pesar de ser solo un simple coronel de baja cuna, pero valiente y digno de confianza.

Frisia era una región alejada de Bruselas y uno de los territorios más recalcitrantes a la presencia española. El territorio comprendía, además de Frisia, el señorío de Groninga, Overijssel y Lingen, aumentando su autoridad a la provincia de Güeldres y las ciudades de Zutphen, Deventer y la plaza de Maastricht.

Y estando en el Gobierno de estas tierras, el coronel Francisco Verdugo ganó la batalla campal de Noordhorn. Una batalla tremenda en la que el ejército español, mandado por el propio Verdugo, estaba compuesto por soldados valones, alemanes, españoles y albaneses, mientras que el ejército rebelde de los Estados Generales, bajo el mando del general inglés John Norreys, estaba compuesto por soldados ingleses, escoceses, valones y holandeses.

El combate se desarrolló en un terreno accidentado y pantanoso más propicio para los tercios españoles. El primer asalto de Norreys al ala derecha de los españoles resultó un éxito, pero la caballería, liderada por Verdugo, puso en fuga a la caballería de rebelde y abrió brecha entre la infantería de los Estados Generales. Entonces el ala izquierda inglesa quedó aislada del resto del ejército de los rebeldes y acabó destruida.

Durante la persecución de las fuerzas de los Estados Generales, Verdugo estuvo a punto de ser capturado a causa de su valentía.

Poco antes de su muerte, el 22 de Septiembre 1595, aun tuvo arrestos para derrotar a los franceses que habían invadido Luxemburgo.

Murió cuando, por órdenes del Conde de Fuentes, Gobernador Interino de los Países Bajos, acudía a reforzar el cerco de la ciudad de Chatelet, siendo enterrado en el convento de Sancti Spiritus de la Orden de Calatrava en Luxemburgo.


FUENTE:elcorreodepozuelo.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario